La respuesta rápida es que no.
Actualmente el número de empresas con programas de contenido sin un propósito más allá de buscar generar ventas directas (contenido transaccional) es abundante y puede carecer de sentido.
Partiendo de que el contenido es comunicación y que la comunicación tiene muchas formas, lo que hay que buscar es conectar con una audiencia no solo receptiva, sino también dispuesta a creer en lo que estás comunicando. Esto es, la confianza como moneda de cambio más valiosa en un entorno digital. Así pues, no es necesario que comuniques tu propósito, tu audiencia podría saberlo de antemano, y puede no estar de acuerdo.
Por lo tanto, además de realizar una investigación previa, con su correspondiente «análisis competitivo», debes preguntarte el por qué y la utilidad real de ese contenido. Si tu objetivo es vender y obtener un retorno inmediato, una estrategia de anuncios PPC es mucho más eficiente.
Si tu visión es a largo plazo, definitivamente sí, te interesa una estrategia de contenido, porque siempre hay historias que contar.
Genera conexiones significativas
Del mismo modo que conectamos con una persona al saber más de ella y compartir intereses e inquietudes, debes implementar una estrategia de contenido que no esté vacía y que responda a las motivaciones reales de tu audiencia. Como seres humanos, nos gusta compartir momentos y conversaciones significativas que podamos compartir después. Este es el fundamento del Social Media.
Comunica de forma efectiva
A nadie le gusta que le cuenten obviedades o que le repitan lo que uno ya sabe (aunque como ejercicio es sano).
Tus palabras no deben estar vacías y deben dirigirse al problema inmediato de tu audiencia. Otra cuestión es detectar la intencionalidad detrás de las preguntas, pero para eso debes conocer a tu audiencia.
Presencia y alcance para tu negocio
Uno de los beneficios a largo plazo de una estrategia de contenido bien ejecutada es el posicionamiento orgánico de ese negocio. Lo que vendríamos a denominar «ser un referente», y puede ser por múltiples razones, no exclusivamente por las cualidades del producto/servicio, sino por lo que representa.
Sumarse a tendencias y repetir discursos no es beneficioso para tu negocio. Para encantar debes desencantar y tener personalidad. Por eso las marcas enamoran, porque existe enfrentamiento, evangelizadores y detractores.
Como hemos mencionado al principio y, dependiendo del sector, puede que no necesites una estrategia de contenido, pero lo que cualquier organización debe tener es impacto, y esa es la mayor de las responsabilidades.